jueves, 24 de abril de 2008


La mayoría de los blogs, incluido el mío (en parte), están destinados a ser una suerte de recipiente infinito en el espacio. En el permanente intento por comunicarnos, en un tiempo como este, aparecen herramientas extrañas. El blog, es una. Y hay muchos blogs. Es más fácil compartir así, tal vez, trás de un computador. Es más fácil llegar a una cantidad anónima de supuestos lectores, para decir cualquier cosa, así, trás de una pantalla. La internet sí que es un océano, frío, impersonal, y lo mejor: aguanta de todo. Tanto que es fácil pensar en su colapso, cómo será su colapso!...vendrán los bomberos del país de Montag para acabar con esta masa flotante de información!La magnitud que se sostiene en estas redes extrañas, gruesas, grises, y calientes es incomprensible. Un monstruo cibernético se alimenta de nuestras palabras. Yo las doy, nosotros las damos, en una afán simple: decir algo, mostrar algo. Comunicar. Una voz se extingue al final de una línea, yo solo muevo mis dedos, un sonido alejado está acabando en la claridad de un campo.

jueves, 10 de abril de 2008

Siempre existen variadas formas de matar el tiempo. Ahora, por ejemplo, no sé qué hacer ni que decir, como si en realidad tuviera que necesariamente tener que hacer o decir ALGO. Siempre es una palabra que se me ocurre fantástica, igual que nunca. Qué es siempre?, qué es nunca?...hablamos de que existen cosas para siempre, o que nunca uno haría tal o cual cosa, nunca...
Parecen océanos, son palabras océanos, yo no puedo comprender. Y uno usa estas palabras, para referirse a cosas, a situaciones, a vivencias y las mezcla con la magia, con la ficción. La ficción en las palabras, buen título para ALGO, cuando no sepa en qué aburrirme, o Palabras fictas, o El lenguaje fantástico...esto es muy fome y demasiado perno, estoy ociosa, ociosa, ociosa, ociosa, y entonces recurro al blog, otra vez!. Artilugio para los pobres vanidosos como yo, que tenemos que andar colocando, cierto! en el ciber espacio nuestras custiones personales, fotos o cualquier lesera que se nos ocurra en el camino, para satisfacer a dos o cuatro o diez lectores (con suerte) que más encima son conocidos nuestros..uf!, o mejor dicho, para satisfacernos a nosotros mismos. Bueno ya, está bien, hablo por mí. En fin, de nuevo aquí, tratando de matar el tiempo de alguna forma, expresión fea y odiosa, sobretodo con una palabra tan hermosa: Tiempo. Si casi es música.